Tiene: 139 mil seguidores en Instagram, presentaciones todos los fines de semana en saraos y discotecas, clubes de fans a ‘tutiplén’, adolescentes y no tan adolescentes enloquecidas por él… ¿quién es?, pues Eustacio ‘Tachito’ Fidel Guevara, ¡ah!, ¿no les suena?, pues déjennos traducirlo a: El Tachi, sí, el fenómeno de la música urbana actual, por lo que las circunstancias nos obligaron a mirar lo que él en específico estaba haciendo, de hecho muchos productores y cantantes lo critican, pero a la vez, también se preguntan, ¿qué tiene El Tachi que no tenga yo?
Aunque hace poco recibió su cédula, ya El Tachi es catalogado por Rodney Clark, reconocido productor musical, “como uno de los mejores talentos que Panamá ha visto en mucho tiempo”. Ajá, así de serio es el asunto. Su éxito ya se nota, pues el cantante asegura que ya vive de la música y aunque no quiso alardear cuando se lo preguntamos, hasta tiene su propio auto.
Sobre la canela y la aversión de algunos artistas del género urbano en Panamá, nos contó: “En verdad cada quien tiene su criterio, cada quien tiene su forma de pensar y como tienen sus años en la música hay que darles su respeto, siempre, sin importar lo que opinen, tienen su experiencia en el ámbito musical… Además agregó: “No todo lo que yo canto es vulgar, lo considero un 50%, hay canciones que son pa’l público, de 10 canciones solamente tengo 2 o 3 que son vulgares, no es así como dicen, pero ya en este año venimos con temas que no son vulgares, con una mente diferente”.
Sobre su vida personal, es papá soltero, terminó su relación con la mamá de su hijo, quien lo inspira a hacer las cosas bien. Su madre, su máxima crítica, la que sin pepitas en la lengua le dice que deje de cantar esas porquerías. “No hay tiempo para novia, ahora mismo estoy enfocado en mi música, con ganas de salir y cantar afuera, para eso estoy haciendo un cambio… es muy difícil que una mujer entienda eso, así que prefiero seguir así”.
Ajá, soltero, pero dejó claro cómo le gustan: “me gustan malas, salvajes, que tengan buen… todo”. Ya saben, chicas.